Mi amor platónico de la infancia

Me gustaría que me acompañasen en mi ratito de lectura, que se implicasen como si fueran ustedes los protagonistas de la historia. Este relato que voy a redactar es completamente cierto y su protagonista soy yo, un servidor...

La historia comenzó hace como unos 18 años atrás...

"V" era la hija de la vecina de abajo de mi abuela. una niña unos 5 años mayor que yo... que entonces, yo tenía unos 9 y ella 14 por ahí... Yo empezaba a descubrir mi sexualidad con la masturbación, no se si fui un tanto tempranero, je je! La cuestión es que yo  a ella la veía como una diosa, cada vez que estaba ante ella me moría de vergüenza y a la vez no quería que el momento acabase. 

Una vez jugaba en las escaleras del portal de mi abuela con unos primos... Cuando V asoma su cabecita por la puerta, diciendo que parásemos de tocar y salir corriendo, de buenas a primeras, se dirije a mi y me dice "Amimante" si quieres entrar, entra! Yo me quedé atónito sin articular palabra. Mis piernas fueron mas rápidas que mi boca y se dirigieron a toda prisa a su casa.

Una vez allí, me invitó a pasar a la alcoba de sus padres a ver la televisón allí, me decía que su familia tardaría en llegar. Entonces empezó a hacerme preguntas... hasta que de repente me dice: Ya has besado a alguna chica? Pobre de mi... Solo "atiné" a hacer el gesto de negación con la cabeza, con lo que ella, figurándose ya de antemano mi respuesta, me pregunta: quieres que te bese ? Ahí sí, ahí no me lo pensé y me lancé hacia esos maravillosos labios que me esperaban! Dios! Lo recuerdo como si estuviese pasando en este mismo instante! Aun estando perdido no se me dió del todo mal (había hecho muchas prácticas con mi mano ja, ja) nos pasamos toda la tarde con nuestras lenguas enredadas. Ella paraba y yo le decía quiero más y más! 

Y así continuábamos cada vez que las circunstancias nos lo permitían. Bueno, continuaba yo, pues ella lo hacía por mero entretemiento. Yo en cambio, besaba a mi diosa!!


Pasó el tiempo y coMo era de esperar de una quinceañera buenorra, se echó novio y se me cortó el vacilón...

Peeeero... pasaron los años y...


Si os ha gustado, pronto publicaré la segunda parte...

Saludos,  



Amimante