Cita con sorpresa

Habíamos recibido mensaje de un chico madrileño  en el que nos decía que vendría el próximo sábado a nuestra isla y partía de nuevo el domingo, por lo que solo tenía ese día para quedar  y conocernos.  Lo comento con mi pareja y me dice que no hay problema, ya que le encanta verme con otro, así que le devuelvo el mensaje aceptando su invitación, pero cuál es mi sorpresa cuando al día siguiente me baja la regla, enseguida corro a escribirle para anular la cita y que le dé tiempo a buscar alguna chica o pareja para aprovechar esa noche, pero en cambio  me contesta que no le importa para nada que la tenga, que le sigue apeteciendo quedar con nosotros, pero que va a llegar sobre las 11 de la noche, porque el vuelo llega retrasado.

Por fin llega el día señalado y vamos a nuestra cita en la terraza del  Hotel Santa Catalina, allí nos esperaba el chico en cuestión, nos saludamos y empezamos a entablar conversación y entre bromas le decimos que el piloto del avión debía ser malo que había llegado retrasado, a lo que nos contesta con toda naturalidad que el piloto era él,   jajá, seguimos charlando y nos invita subir a su habitación, a lo cual accedimos.
Una vez allí, me desnudan completamente y empieza a jugar conmigo, pero al momento, la regla hace su aparición y manché el piso, lo cual me cortó un poco porque como iba a dejar manchado un hotel de tanta categoría, entonces mi marido nos dice ¿porqué no se meten en la bañera y allí no hay problema de manchar?, pues dicho y hecho, nos metimos, me pongo a 4 patas y él empieza a follarme con toda su rabia contenida, como era un poco incómodo nos fuimos a su cama y allí se tendió y se puso a mi disposición, yo, empecé a recorrer todo su cuerpo con mi lengua y notaba su respiración agitada, lo cual hacia que me esmerara más y más en mi cometido hasta que súbitamente algo blanco empezó a asomar e inundó toda mi boca.
El piloto exhaló un suspiro y con voz entrecortada me dio las gracias ya que había tenido un día muy duro de trabajo y necesitaba esa liberación.
Nosotros nos fuimos al poco, pues él tenía que madrugar para regresar de nuevo con el avión, pero al día siguiente al abrir mis mensajes, me encuentro otro en el que  nos decía:” Os agradezco el rato que me hicisteis pasar, sobre todo sabiendo el contratiempo que teníais”, después de ese día, nos envió dos mensajes más para quedar en otros viajes, pero no hemos podido cuadrar de nuevo.