Mi mujer es una amante de los masajes relajantes (no eroticos) pero muy reacia a tener cualquier tipo de relacion swinger asi que me era muy dificil conseguir mi proposito, llevaba mucho tiempo dandole vueltas a la cabeza y masturbandome mientras pensaba como otro hombre la podria hacer disfrutar. Llego el momento de ponerse manos a la obra, despues de un tiempo buscando al hombre ideal el cual tenia que reunir varios requisitos pues estaba en juego la relacion con mi mujer.
Decidimos tomarnos un cafe juntos para ultimar los detalles, pues si algo salia mal yo podria salir muy perjudicado, acordamos que tenia que aparentar algo casual y ser muy sutil para que ninguno de los dos tuvieramos ningun problema, lo unico que le pedi a cambio fue que me dejara la ventana abierta para yo discretamente poder ver el panorama.
Porfin llego el dia, le dige a mi chica que le tenia un regalito preparado para que se relajara de tanto trabajo y agobios, ya anteriormente le habia regalado algun masaje pero sin "final feliz". Ella jamas se hubiera imaginado lo que estaba tramando y acepto muy agradecida.
Llegamos a su casa y yo pase a una pequeña sala de espera, el muy amable acompaño a mi chica hasta la habitacion que tenia acondicionada para realizar los masajes ( se dedicaba a eso de una manera informal) desde que pasaron a la habitacion con mucho cuidado me levante y me coloque junto a la ventana que daba hacia la habitacion y tenia una pequeña cortina que yo rode con cuidado para que ella no se diera cuenta, ella se quitaba su ropa detras de un biombo y se coloco una toalla, Carlos le dijo que se quitara tambien la ropa interior para que no se manchara con los aceites mi chica accedio un poco avergonzada pero con confianza plena de que el era solo un profesional. Se tumbo en la camilla y Carlos se embadurno sus manos con el aceite para empezar a humedecer su cuerpo y recubrirlo con las manos para poder hacer el masaje, pasaron como 20 minutos donde el se centro en la espalda de mi chica veia como ella estaba relajadisima y estaba disfrutando de ese masaje, llego el momento de pasar a las piernas, aun tenia el culo tapado con la toalla y comenzo por los tobillos para seguir por todas las piernas, vi como cada vez que movia sus manos se iba acercando cada vez mas a la entrepierna de mi mujer, yo cada vez estaba mas cachondo pues se acercaba el gran momento, a la vez estaba muy nervioso por lo violento que podia ser si mi mujer no aceptaba lo que sutilmente le iba a proponer Carlos, hubo un momento que acerco tanto sus manos a su sexo que vi como ella inconscientemente cerro las piernas, tal vez se sentia incomoda, pero el reacciono rapido y le susurro al oido que se relajara y con ayuda de sus manos le volvio a abrir las piernas, siguio en su empeño de conseguir lo que los dos ansiamos y poco a poco seguia acercando sus manos... esta vez subio la toalla un poco mas y la dejo encima de su cintura dejando el culo de mi chica al aire, vi como el seguia masajeando sus piernas y cada paasada le masajeaba un poco mas las nalgas con mucha sutileza fue entrando hacia su entrepierna pero esta vez mas profundamente y pude notar como mi mujer se acomodo y abrio un poco mas las piernas para facilitarle el acceso, esta vez si Carlos aprovecho y comenzo a masajear su ano y su coño veia como mi mujer se estremecia y ponia sus piernas tensas sin levantar la cabeza de la camilla, supongo que estaria avergonzada de la situacion pero se estaba dejando llevar muy bien, cuando Carlos se coloco delante de ella pude ver como mi mujer, a ciegas con sus manos buscaba el pantalon de Carlos, hasta que pudo palpar su polla, dura y grande se notaba bajo el pantalon, el la ayudo bajandose los pantalones y dejando al aire semejante herramienta que mi chica sin dudarlo comenzo a tocarla mientras levantaba la cabeza para metersela en la boca, yo estaba estupefacto tenia un sentimiento de placer por ver la escena pero a la vez sentia algo de dolor por la traicion que suponia que mi mujer accediera a tal proposicion, supongo que ella sabia que ese era mi regalo pues ya se lo habia propuesto en momentos de pasion. Yo desde la ventana podia ver como mi chica succionaba como si no hubiera un mañana aquella polla que se veia muy apetecible hasta llegar incluso a probocarle arcadas el mientras fisfrutaba de una rica mamada seguia metiendo sus dedos en el coño de mi chica con un arte que me dio envidia saber masturbar asi a una mujer, la vi disfrutar del momento y Carlos con sus manos la ayudo a sentarse en el camilla el se arrodillo y comenzo a comerle el coño hasta que no pudo mas y se corrio, se incorporo y con su mano agarro la cabeza de ella yla llevo de nuevo hasta su polla la puso a mamar un rato y luego la tumbo de nuevo en la camilla con su cuerpo al borde para poder follarla, mientras se ponia un preservativo ella hizo señas para que entrara, yo no sabia que hacer, si hacerme el loco como que yo jamas vi nada o entrar pues me moria de ganas, ya mis pantalones estaban por los tobillos mientras me tocaba viendo esa pelicula xxx entonces ella levanto su cabeza ymiro para la ventana donde yo estaba entonces me dijo... entra! Rapidamente entre a la habitacion donde olia a sexo un olor delicioso y me puse a su lado mientras le tocaba sus pechos vi como carlos la penetraba y ella se retorcia de placer, cada vez las embestidas eran mas fuertes se podia escuchar los golpes mientras la follaba, ella agarro mi polla y se la metio en la boca, yo no aguantaba mas y le llene la cara de leche, ella siguio con mi polla en la boca para evitar gritar de placer hasta que se corrio de una manera que muy pocas veces habia visto a mi mujer correrse asi, carlos saco su polla de dentro se quito el condon y con ayuda de sus manos aun untadas en aceite sr corrio encima del coño de mi chica...