Un año más he vuelto del Cap d’agde, el sitio donde la gente tiene sexo sin pedir perdón. Y esto fue lo que pasó:
Agradecimientos
Desde el principio el “factor catalán” ha sido decisivo para poder llevar a cabo mis vacilones en el Cap. Miguel la primera vez y Carmen y José María ahora, demuestran que los tópicos se cumplen pero al revés. Gente desprendida y generosa, a los que solo les falto arroparme por la noche, hicieron que mi entrada en el Glamour fuera lo más cercano a una estrella del rock que estaré nunca, saltándome las kilométricas colas y entrando sin esperar, como los grandes. Sin sus valiosas informaciones no hubiese vivido mucho de lo que viví.
El nuevo Le Glamour
Se podría decir que nunca a algo le sentó tan bien un incendio. El nuevo Glamour renació de sus cenizas en el que sin duda ha sido el regreso más espectacular después del de Lázaro. La clientela, que parece seleccionada por un casting, da que pensar si en el Cap los feos se esconden bajo las piedras. Todo es exhibicionismo y pavoneo, poca tela, mucho plástico y chicas que pareciera que measen colonia. La discoteca ( ¡2000m!) luce ahora más elegante, más “cool” y la iluminación más lograda. Sólo faltan los Ferrero para que parezca las recepciones del embajador (pero en despelote, claro). Pero como en aquella de terror lo mejor sigue estando “al final de la escalera”. Cuando bajas a “las catacumbas” sufres un subidón sensorial. La tenue luz y ese inquietante hilo musical que acompaña la banda sonora de gritos y jadeos te envuelven en una atmósfera a lo “Eyes Wide Shut” de kubrick. Los pequeños cubículos acogen tríos, cuartetos y sinfonías. Algunas pollas aparecen y desaparecen por los agujeros de las paredes mientras al fondo una mujer es montada estilo perro por una cola de chicos que espera pacientemente preservativo en mano.
Gracias a la inestimable ayuda de Carmen puedo pasar a la zona de parejas, siempre custodiada por un vigilante para que nadie se pase de listo. La decoración es sobria y elegante y hay tanto ajetreo que parece la rambla. Ríos de cuerpos desnudos transitan por los pasillos musitando en voz baja. Es difícil avanzar por la multitud que se mira y se toca sin mediar palabra. “Devuelta” Carmen a su José María regreso a donde me toca justo cuando una espectacular gacela de piernas infinitas es ayudada a bajar por la escalera con los ojos vendados. Hay mucho cachondeo entre el que parece ser el novio y la amigas. La chica va tanteando a ciegas a los “habitantes de los pasillos”. Cuando da conmigo el novio le baja la mano a mi entrepierna y ella dice “¡no es Fabio!”. Supongo que el tal Fabio la tenía más grande ja ja ja. Por cierto, es buen momento para apuntar la avalancha de italianos que hay en el Cap, hasta el punto de que el Glamour les dedica uno de sus días temáticos. Forza Italia lo llaman.
En la penumbra de un cubículo me encuentro a mi amigo Jorge, también de Canarias, que me cuenta que la noche anterior estuvo en una fiesta de cumpleaños donde el regalo era él. Este hombre merecería un blog para él solo. La noche se prolonga hasta las cinco de la mañana, hora de volver al apartamento usado y maltrecho pero feliz.
Histories de O
Tenía algunas reticencias a entrar en la sauna Histories de O. Los 50 euros de la entrada y la pinta exterior, que no hacia presagiar lo que sucedía dentro me echaban pa’tras. Pero un hombre sabio me dijo que valía la pena y como cuando los hombres sabios hablan yo escucho, entré. Creo que en España el binomio sauna-sexo es algo monopolio de los gais así que esto fue todo un descubrimiento. Esta compuesto por dos locales conectados interiormente por una puerta con portero electrónico. Uno es para parejas, que pueden transitar libremente por ambos. El otro es solo para hombres que deben permanecer allí…confinados y a la espera. El bar, de paredes y sofás blancos es muy “chic” y aunque lo lleva un achica que a veces parece morir de agobio, el ambiente es muy relajado. Dentro, la gente discurre por los pasillos, mirándose y a la espera de que se inicie la acción. Al fondo, una pequeña habitación de barrotes luminosos acoge a una mujer que da buena cuenta de diez o doce pollas que la saludan desde el exterior. Algunos fulanos apostados a las puertas de los cubículos esperan a que algo pase. El Jacuzzi es realmente grande y cuando entró una de las rubias más guapas que he visto nunca me hizo pensar si el hombre no estará emparentado lejanamente con la piraña. Al olor de los fluidos los tipos aparecen incluso de debajo del agua. Ella no parece sufrir mientras la devoran.
Según pasan las horas el flujo del local “parejil” al nuestro es más fluido. La gente rompe a follar hasta en los sofás de la cafetería y llegado un momento todos parecen liados con todos. La nota inquietante la puso un viejecito vestido ridículamente de mujer, clavado a “pozi”, que oculto en una habitación esperaba enseñando la lengua. Era inofensivo pero daba mucho miedito.
Una anécdota : en una ocasión que entre a la sauna oí a una pareja hablando en español con un chico que seguía la conversación con acento francés. Hablaban de la crisis en España, de la carestía de la vida, del precio de los huevos (literal). Afuera el sexo campaba a sus anchas pero ellos hablaban, y hablaban y yo sentía curiosidad por ver como terminaba todo. Al final, se despidieron del chico que resignado y erecto comentó a un amigo “españoles…”. Cuando entre era mediodía, al salir ya la gente se preparaba para cenar.
Hombres solos y solícitos
No olvidar nunca que el ser humano hombre e impar es duramente discriminado en el Cap. Me pregunto como sería la cosa si todo fuera al revés:
Grandes titulares: “Prohíben la entrada en un club a una mujer por el hecho de serlo”
A Mercedes Milá le faltaría tiempo para ir con una cámara. Se puede dar la circunstancia de estar en un bar con tu pareja, y si al salir discuten y cada uno se va por su lado el hombre ya no será bien recibido en el bar que estuvo cinco minutos antes.
Desde aquí propongo que no dejen entrar a los tíos tampoco a los supermercados. Que mueran de inanición y sus cenizas esparcidas en el Jeux de Mains, el único sitio donde nos comprenden.
Jeux de mains
Sigue tan encantadoramente sórdido como siempre. Su éxito es también su fracaso. Es uno de los pocos sitios donde los hombres solos son bien recibidos y las mujeres encantadas de que lo sean. La testosterona se repite en el ambiente que a ratos es insoportable. Todos saben a lo que van y todo pasa como tiene que pasar. The real thing!!
Cachondeo en los apartamentos
Sigo teniendo la sensación de que el Cap sigue teniendo éxito con lo mínimo. Mientras en Canarias se debate sobre renovar la planta alojativa para conseguir un “turismo de excelencia” aquí triunfan con sus antediluvianos apartamentos sin ascensor y con todo tipo de barreras arquitectónicas. Sigue haciendo falta un buen señor Costa “en esta nuestra comunidad”(swinger) del Heliópolis. Las zonas comunes se ven muy machacadas y parece como si los jardineros hubiesen salido huyendo. Mejor pinta tiene la zona de Port Nature. Es un cachondeo. La gente se sienta en la baranda de las terrazas que dan al paseo formando animados grupos que comparten vino y piscolabis. El ambiente se calienta antes de la salida nocturna. No es difícil que los del apartamento de arriba liguen con los de abajo y los de abajo con los de al lado. En una ocasión una mujer de lejana parentela española y su marido insten en que pase, al caer la tarde, por su apartamento a tomar el aperitivo. Cuando voy había cuatro parejas más y una chica que, asombrosamente, no estaba con nadie (me explicaron porque pero no entendí nada). Contaban cosas que debían ser muy graciosas y yo me sentía como la mosca en la sopa .Por suerte había por allí una guitarra y fue tal el éxito de mi versión de “Volando voy” que del apartamento de abajo subieron dos parejas más. Después de mucho vino y muchos toques acabé en mi apartamento con la chica pero pueden creerme que me sentí raro, a solas con ella, sin gente, sin música, sin luces….
La gente se presta rápido, si hay buen rollo, a decir su número de apartamento para que les hagas una visita. Estuve en unos cuantos intentado repartir felicidad como un Papa Noel cualquiera.
Una anécdota: Cuando reservas un apartamento por la agencia tienes que dejar de deposito entre 150 y 1000 euros dependiendo del tipo de alojamiento. El deposito te será devuelto 14 días después de chequear que no te hayas mangado nada y…atención que hayas dejado la cocina, el baño y el retrete limpios (ellos también hacen este servicio por 16, 20, 25 euros dependiendo del alojamiento). Si hiciésemos eso en Tenerife nos quedaríamos sin turismo inglés.
La playa
Los apartamentos, la panadería, el Super, en cualquier lado puedes conoce gente. Pero la playa se lleva la palma. Estando un día todo aturullado intentando ponerme crema en la espalda siento una voz que se ofrece a ayudarme. Una gigantesca y estilosa mujer me embadurna el cogote al tiempo que me dice algo que imagino. Al terminar el día y después de varias miradas cómplices, me desliza un papelito con su teléfono mientras el marido recoge los bártulos playeros. Resultaron ser noruegos y muy simpáticos. Al marido gustaba de asistir a nuestros encuentros sexuales de rodillas y con la cabeza gacha. Ignoro porque. Cosas de parejas.
Miscelánea
-El concepto ropa sexy y hombre sigue siendo una asignatura pendiente. Mucho “Sexy pour madame élégant pour monsieur” pero los tíos a lo más que llegan es a un look “testigo de Jehová un domingo por la mañana”. Aún así cualquier cosa es preferible al tanga masculino. Por cierto aunque se vaya al gimnasio, ¿es necesario caminar siempre como si se tuvieran dos golondrinos bajo el sobaco?
-El aumento de los Fabio Briatore con la Chabeli es alarmante ( esto es, un pureto canoso con las guedejas largas por detrás con lolita a juego). Por otro lado esto nos da a todos esperanzas en el futuro.
-Definitivamente la silicona no le sienta bien a casi nadie.
-Vale la pena ir a Francia para que luego España te parezca barato.
-¿Como puede haber tantas mujeres sexy de cuarenta y taaantos largos?
-Algunas parejas nuevas parecían estar desencantadas. O bien imaginaban otra cosa, o bien el Cap se trata de el Glamour con un pueblo nudista alrededor o bien es un coñazo de exhibicionismo insufrible. A mi cada vez me gusta más. Cuestión de opiniones.
Y así llegan al final estas aventuras Capdagdianas donde una vez más diré que no volveré y donde estaré probablemente el año que viene. Ahora toca buscar refugio en algún sitio donde descansar de tanto sexo sin freno. Y que mejor sitio que el foro Dogging-Canarias? Un saludo
tenerife-guy | 27/07/2019 15:34
Gracias.Me alegro de que lo hayas disfrutado.