Una experiencia inolvidable

Hacía tiempo que miraba su perfil, pero por miedos internos o los “fantasmas” propios nunca daba el paso, hasta que llegó el día, por mi parte y a ojos de los demás siempre he sido o me consideraba “hetero” (aunque no me gustan las etiquetas), solo hacía unos meses que había aceptado que me gustaban los chicos.
Pero vamos al lio, nos escribimos un mensaje a través de está página y quedamos para morbosear, llegué, aparqué el coche cerca de su casa y le avisé que justo acababa de llegar, supongo que antes de dar su dirección necesitaba cerciorarse de que la persona cumplía con el perfil.
Una vez hechas las presentaciones me invitó a subir y wow, pensé que tío más guapo, alto, fibrado, con vello cuidado, moreno, seguro de sí mismo… y tomamos algo durante una larga charla, lo cierto es que nos costó dar el primer paso, que sin duda alguna era ponernos cómodos. Y realmente él hizo que todo fuera fácil … una caricia, un beso y poco a poco nos quitamos la ropa, he de reconocer que estaba muy nervioso, ¡la sorpresa llegó cuando se quedó en bolas! Madre mía, menuda herramienta, me acuerdo de que le pregunte ¿de dónde has salido? Y sin sonrojarse me soltó “de xamigos” jejejeje.
Fue muy cariñoso, estuvimos jugando con nuestros cuerpos, nuestras partes y enseguida supe el rol que ocuparía, para mi era la primera vez, me preguntó y sí, me apetecía estaba muy excitado, pensé que no podría con tal aparato, pero me trabajó primero con los dedos, lubricó, ensalivó y tal y como él me dijo (siempre con la gomita) la entró toda despacito, dando golpecitos suaves, me dolía un poco pero era tolerable, no sé cuánto tiempo pasó dando golpecitos pero cuando me di cuenta la tenía hasta el fondo, y he de reconocer que me gusto y mucho, la hubiera tenido dentro toda la noche.
Después nos pegamos una ducha y nos recostamos un rato más, estaba en la gloria, jugando con el vello de sus pectorales, ombligo, ¡besarte el cuello… y antes de irme le di un besito a su capullo, que volvió a ponerse dura como una piedra!... pero eso será otra historia.
Esta ha sido mi primera y de momento única vez, pero llevo desde ese viernes sin parar de pensar en él, wowwwww, ¡dónde ha estado todo este tiempo, es como una droga, tengo ganas de más, me da hasta vergüenza admitir que me gustó todo, por dentro y por fuera, supongo que para que suceda esto ha de coincidir que sea la persona correcta, que te atraiga físicamente y que puedas mantener una conversación… sin duda me quedo con todo el paquete!
Ojalá, lea esto, se de por aludido y me escriba para volver a quedar! Tengo ganas de más…