Acababa de llegar a otra isla donde iba a pasar una semana de vacaciones y decidí abrir una de las aplicaciones de ligues de las que suelo frecuentar pues me estaba empezando a relajar y eso hacía que me pusiera algo excitado.
Al poco rato de estar curioseando recibo una tap, una llamada de atención, de otro perfil. Este era de un chico jovencito en el que solo ponía una foto de su cuello y su edad, 19 años.
No suelo fijarme en chicos tan jovencitos pero, no se por qué, entablamos conversación. De un simple saludo pasamos a lo que buscábamos, del como eres al que te gusta y, cuando me fui a dar cuenta, estábamos cuadrando para quedar.
Yo no dije que no pues, después de verlo por las fotos y la curiosidad que despertó en mi, me vi apetecía hacerlo.
Quedamos a las 23:30 en el lugar donde me pidió que lo recogiera. Así lo hice, fui hasta allí y allí estaba con un pantalón corto de la pantera rosa, camiseta y gorra blanca, calcetines a media pierna blancos y tenis del mismo color.
Subió al coche - hola - con esa palabra noté que estaba nervioso. Decidí entablar conversación con él para que se fuera soltando y así fue.
Fuimos hasta unos aparcamientos distanciados y con muy poca luz y detuve el coche.
Le pregunté - ¿estás bien? Si no quieres no tenemos porque hacer nada. -
- si quiero, a eso vine, ¿ y tú?
- también- acto seguido después de mi respuesta me agarro del cuello y se abalanzó a comerme la boca. Ni te imaginas como lo hacía, me puso las hormonas totalmente revolucionadas. Poco a poco nos fuimos metiendo mano y, la mía, se dirigió directamente a su entrepierna, cosa ee la que se dio cuenta y me facilitó el trabajo abriendo aún más sus piernas.
Cada vez estábamos mas y más calientes y notaba como su miembro crecía en mi mano. No aguante más y me dispuse a comerla. Le quite todo y ahí estaba, que polla tenía ese jovencito, que gozada.
Yo mamaba su polla con tantas ganas que solo oía como gemía con cada lametazo que le propiciaba mientras sus dedos comenzaron a entrar en mi culo, lo que me puso aún más caliente.
La temperatura cada vez subía más, cosa que denotábamos por cómo sudamos y se empañaban los cristales, y nuestra intensidad también.
- que bien la comes, como lo haces, sigue comiendo polla zorra- me decía
Yo estaba tan caliente que cada vez entraban más y más sus dedos en mi.
- quiero follarte - dijo
- ¿estás seguro?- respondí
- no tengo lo estoy preguntando, te digo que te sientes en mi polla que te la voy a clavar zorra-
No tuve que esperar que me dijera nada más. Acto seguido estaba yo encima de él en el sillón del copiloto, con su polla en una mano y ensalivándose el culo para acto seguido clavarme el pollon mientras gemía y se movía para meterla completamente en mi.
Lo cabalgue tanto como deseaba mientras oía todo lo que decía y le pedí que me preñara completamente.
- que buena puta eres pero, esta le gira va en tu boca así que trágatela que la vas a probar.
Volví a mi postura original y desde el aviento del conductor le empecé a dar otra manada con todas las ganas que me era posible pero - ¡despacio! - me dijo. Baje el ritmo de mi mamada y mi mano mientras lo pajeaba y él se relajó y siguió gimiendo como loco hasta que sus gemidos se acompañaron de unos espasmos que llenaron mi garganta de leche y sus gemidos en alaridos de placer.
- ¡que buena follada! Tenemos que repetirloZ
- eso espero- le dije y ambos sonreímos.
Le preste si estaba bien y él dijo sonriendo - muy bien-
Nos vestimos, ventilamos un poco el coche y me pidió que por favor lo dejara donde lo recogí.
Así hicimos.
Antes de bajarse dijo - Bueno, chao -
- Chao, hablamos - respondí
- por supuesto - respondido sonriendo y cerró la puerta.
Yo seguí mi camino.
Ya hemos hablado y no creo que tardemos en volver a cuadrar
discretmen | 31/10/2024 13:21
Tendremos que escribirlo primero