Un buen amigo

Corria el verano del 98, yo tenía 19, acababa de sacarme el carné de conducir, era el primero de nuestro grupo en tenerlo, éramos un grupo de 7 que solíamos ir a todos sitios juntos, y jugábamos al fútbol en una vieja cancha del barrio, teníamos entre 17 y 19, los viernes después de jugar al fútbol nos íbamos a un barrio cercano a cenar en un piscolabis y después nos metíamos en casa de uno a ver la peli porno del plus, y como era normal en esa edad nos tocábamos unas pajas viendo la peli.
Yo tenía que pintar la casa de mis abuelos y me acompañó uno de estos colegas, imaginad, 18 recién cumplidos, cuerpo de fitnes, pues era futbolista en un conocido club de mi ciudad, peludo y atractivo, era un picaflor, teníamos constancia de que se había acostado con unas cuantas del barrio, y actualmente tenía novia, así que no se me pasaría por la cabeza que le gustasen los tíos, ni a mi tampoco me gustaban o eso creía, bueno nos fuimos a casa de mis abuelos y nos pusimos a pintar de inmediato, en una de esas que fui a por más pintura me di cuenta que el, que estaba subido en la escalera, no llevaba slips, se le veía todos los huevos y el rabo, tenía unos huevos de toro, colgantes y grandes, en proporcion a su altura pues medía 1’85, yo me reí y le dije que iba a lo tigre, y empezó a reírse, esa tarde cuando terminemos nos fuimos a casa de una tía mia que estaba de viaje, nos metimos en la ducha, no era la primera vez que nos duchábamos juntos, a mi el agua caliente hace que se me empalme, imaginad la situación, en una de esas que mi rabo roza su nalga, el se ríe y se da la vuelta, vi que estaba empalmado también, y me dice: a mi también me la pone dura el agua caliente, ambos reímos, pero en ese momento lo mire de diferente manera, una que nunca lo había mirado, mi rabo es normalito medirá unos 16-17 cm, pero la de él era algunos centímetros mayor que la mía, creo que unos 19 o 20, y gruesa, cuando se tocaba las pajas no podía agarrarse la base de su rabo con la mano, y era sin circuncidar, le sobresalía un resto de piel bastante abundante,
justo en ese momento el salió de la ducha, me quede con el grifo abierto observando cómo se secaba, tenia un cuerpo envidiable, velludo y con ese rabo sobresaliendo, joder que me estaba pasando, estaba mirando a mi colega con el que me había hecho muchísimas pajas mutuas( yo se la tocaba y el me la tocaba) el parecía que se estaba exhibiendo, terminó de secarse y salió desnudo a la habitación, yo hice lo mismo, me seque y salí hacia la habitación, todavía estaba empalmado, el me vio y se reía y me dijo si buscaba pelea, ambos nos reímos, me vestí y nos fuimos a cenar con la familia.
Despues de una cena copiosa nos fuimos, paremos antes por un cinebank ( para los más jóvenes, era un videoclub 24h que funcionaba como un cajero) y nos pillemos dos pelis una de ellas porno, cuando lleguemos nos pusimos cómodos y empecemos a ver la pelí, al rato me dijo que por que no veíamos la porno, y la puse, y acto seguido tárdemos muy poco en ponernos “contentos “ jejeje, ya se nos notaba la ereccion mucho, yo me quité los slips y el hizo lo mismo, después de varios minutos dándole le dije de hacerlas mutuas y asintió, ahora que la tenia en mi mano la miraba de diferente manera, intenté hacerle el capullo todo para atrás pero le molestaba, lo que hice fue poner saliva en mis dedos y estuviera más cómodo, el lo agradeció y el hizo lo mismo, pasados varios minutos tenia que poner saliva otra vez, y lo que hice fue acercar mi cabeza hasta la punta de su polla, nos separaba apenas unos centímetros, podía oler ese olor rancio que me puso muy cachondo, le escupí un lapo y me hice para atras, el me miro y sonreía, el hizo el mismo gesto, y escuché cómo mascullaba algo, me dijo que no tenia saliva que si podía probar algo, le dije que si, nunca se me pasaría por la cabeza que fuese a metérsela en la boca, cuando noté su lengua recorriendo mi rabo, fue una sensación diferente, haber a mi me la habían chupado pero solo mujeres, tanto yo como él teníamos novia, así que esa sensación de que un tío, un amigo del grupo me la estuviera chupando me puso más cachondo,
después de varios minutos chupándola y masajeando le dije que parase pues me iba a correr, el paro y se levantó, me miro de una manera que nunca le había visto y me sonrió, acto seguido nos encontramos besándonos, nuestras lenguas recorrieron cada milímetro de nuestras bocas, nos levantamos y nos pusimos en el suelo, empecemos a chuparnos mutuamente las pollas, estábamos disfrutándolo increíblemente, no podía chuparla entera la de el, joder era muy grande y gorda, menos mal que no se le ocurrió agarrarme la cabeza para hacérmela tragar entera, algunos minutos después tuve que volver a pararlo pues me corria, estaba lo suficientemente cachondo como para llenarle la boca de lefa, pero quería disfrutar lo más posible, el paró y se quedó mirando como yo recorría su rabo con mi lengua, acto seguido se levantó y se puso encima de mi, de rodillas, agarró mi rabo y se lo puso en su ojete, se la metió poco a poco, por su cara se veía que le dolía algo, pero el no paró, el llevaba el ritmo y después de par de minutos vi que ya no le dolía y estaba disfrutando, su respiración acelerada con sus gemidos me ponían muy burro, aumentó el ritmo de una manera donde su rabo muy duro golpeaba en mi barriga( yo soy gordito) una y otra vez, estaba a punto de correrme y le dije que parase, no lo hizo, se movía más rápido, lo cogí de la cintura y cuando me fui a correr mis gemidos quedaron ahogados por el beso que me estaba dando, notaba los pelos del pecho junto al mío, separó sus labios de los míos y me miro con una sonrisa increíblemente dulce y erotica, el se la saco y cayeron varias gotas de mi lefa en mi rabo todavía empalmado,
yo cuando me corro después tengo que para por que me da muchísima sensibilidad, pero esta vez no fue así, supe que era mi turno de complacerlo, me levante y me senté igual que el, acerque su rabo y empecé a metérmela,
joder si que dolía, fui poco a poco, era grande y dolía bastante pero no quería parar, poco a poco fue entrando, después de varios minutos ya no me dolía y estaba disfrutando como nunca lo había hecho, el me agarró y empezó a darme unas embestidas que descolocarían las caderas de cualquier persona, ya se de donde sacaba esa fuerza, esos entrenamientos se notaban, estuvimos así un rato, yo estaba recibiendo un placer que no podía describir, estaba a punto de correrme otra vez, cosa que nunca había pasado, se lo dije y aumentó el ritmo hasta que me dijo que se corria, daba unas gemidos increíbles, pero el no paraba y acto seguido me corrí yo, los chorretones le llegaron a la cara y no se si se tragó alguno, fue increíble, los gemidos se unieron, me acerqué a él y lo besé, había una mezcla de saliva y mi lefa, fue una cosa maravillosa, nos separamos y me recosté a su lado, le pregunté que como lleguemos a esto, el me dijo que llevaba tiempo queriendo hacerlo, pero no se atrevía por si yo no lo entendiese, pero que esa misma tarde en la ducha se dio cuenta de como lo miraba y se decidió hacerlo, estuvimos hablando un rato, el me contó que nunca lo había hecho, pero que llevaba mucho tiempo donde le atraían los chicos, en las duchas del equipo miraba a sus compañeros pero no había hecho nada, el mundo del fútbol es muy homofogo, aunque seguramente no sería el único,
después de un rato nos levantamos y nos volvimos a besar, nos duchemos y nos acostamos a dormir, por la mañana nos levantamos “enérgicos” jejeje, pero eso es otra historia.
Nos dimos cuenta de que nuestra amistad había subido un escalón mas, ambos teníamos novia, esto nos unió mucho, actualmente nos solemos ver de vez en cuando para “jugar”, ambos estamos casados, y tenemos hijos, el sigue manteniendo ese cuerpazo, yo por mi parte no he cambiado, hemos quedado muchas veces y hemos descubierto muchas cosas que antes no sabíamos y que disfrutamos, próximamente contaré más historias de él que son muy interesantes . Espero que os guste