Día de mi cumpleaños y decido que es hora de hacerme el regalo que he estado esperando toda mi vida, quiero un Amo.
No sabía, donde buscar, ni que estaba buscando exactamente, pero estaba decidida a hacerlo.
Me puse en contacto con un buen amigo, que me habló de alguien al que conocía, pero él realmente no pertenece al mundo BDSM, así que solo me paso su nombre y número de teléfono, me tocaba valorar a mi.
Dios, que nervios!!! Era esto lo que yo buscaba??.
Dos días tardé en ponerme en contacto con él, mientras imaginé mil y unas fantasías. Atada en una cruz y azotada, follada por varios tíos a los que mi Amo me ofreciera...
Y hablé con él, chateamos, me acuerdo que una pregunta fue..¿Que es lo que quieres?, y mi respuesta fue que no lo sabía exactamente, qué si tenía claro era mi carácter de sumisa, pero nunca sería esclava. ILUSA!!!
Seguimos hablando, me fue enseñando de que va está vida, "no es un juego", me dijo es un estilo de vida.
Nuestro primer encuentro ya fue maravilloso, después de cenar y hablar un poco, entramos aún club. Se me apetecía, me había despertado la curiosidad y con ella el morbo.
Dios fue GRANDIOSO, como me agarró mi pelo y tiro de mi cabeza hacia atrás para meterme su lengua en mi boca, no fue un beso, fue mucho más. Note como mi clítoris se hincho de repente y por mis muslos bajaba mi flujo (no llevaba bragas, su primera orden), me hizo correr sólo con ese beso.
Sin soltarme el pelo metió su mano bajo mi falda y atrapó mi clítoris hinchado, húmedo y blo pellizco, haciéndome sentir lo que es el placer del dolor.
En mi cabeza no había nada, solo era mi cuerpo, el placer, el dolor, al fin había recibido mi regalo de cumpleaños.
Empezaba mi camino hacia la libertad como esclava de mi Amo.
Cada sesión es única, en cada una de ellas el placer me agota, y me he vuelto adicta, a sus azotes, a sus perversiones, a que me haga correr sólo con decir mi nombre perra mamona. Por qué sí, me encanta mamar pollas, especialmente la de mi Amo, que me llene la garganta con ella me asfixie, me llene y me haga vomitar su leche.
En este cumpleaños he recibido dos regalos mi Amo y la libertad de gozar del sexo, del morbo como nunca lo había hecho.
Ya estoy pensando en qué pedir el año que viene, 😏😏😏