Un jubilado muy rico.

Estaba en casa aburrido, con la polla muy erecta y no conseguía a nadie para descargar, tenía ganas de meterla, aunque normalmente soy pasivo, nada, fui en buscar del grinder y la página y nada, salí a la calle varias veces con la polla dura, pero no conseguí nada... Por grinder un señor me contacto que quería un trabajo de costura, le dije que viniera al taller para ver qué quería, llegó mi feo, ni guapo, ni tan mayor como pensaba, empezamos hablar y hablar, lo invito a sentarse y me empezó a tocar la piernas y mi polla enseguida se hizo grande, luego me cogió por la nuca y me besó, besaba muy rico, con mucha lengua y saliva (cosa que me pone a mil) le dije; que te parece si nos desnudamos y vamos a la cama, así lo hicimos, no dejamos de chuparnos y comernos todo, lo puse a cuatro patas y se la metí, muy rico, un culito cerradito, luego el no paraba de comerme las axilas, de chupartela, morderme los pezones y besarme mucho, intento follarme pero se le bajaba, su polla estaba muy rica de unos 18 cm no muy gruesa ideal para mí y mi culete (la pena que no pudo), tuve que aguantar varias veces las ganas de correrme ya que me gusta esperar a la otra persona, se corrió el primero encima de mi, no fue mucha la leche, pero si calentita y muy espesa, muy rica, luego me corrí yo, que manche todo mi pecho, ya que tenía mucha cantidad acumulada, gran sorpresa con el jubilado.