Puta ordinaria con un coño ordinario

Me encanta ver algo que me pertenece de rodillas, chupando una polla y masturbando otras dos. Mírate intentando ser la mejor puta del mundo. Quieres que cada una de ellos sepa que te arrastrarías sobre un cristal para hacerles correrse. Esperas que sus erecciones estiren su prepucio hasta el punto de desgarrarse. ¿La manifestación física de su necesidad por ti te hace especial? ¿O es algo más? ¿Quizás eres una puta ordinaria con un coño ordinario?

Abriendo tanto que intentas meter dos pollas en tu boca al mismo tiempo. Sientes la forma en que luchan por el fondo de tu garganta. Te pillo mirándome para ver si lo apruebo. Pero no lo apruebo. No lo haré. ¿Cómo podría hacerlo cuando tus gemidos hambrientos se filtran alrededor de dos gruesos trozos de carne presionados por tus labios? Debe confundirte, mi expresión y aun así me uno a ellos en manosear toda tu carne.

La testosterona sube como el agua del sótano después de que se revienta una tubería. Se acumula en un solo lugar y tiene una forma de alimentarse a sí misma. Gruñimos, asentimos y compartimos sonrisas cómplices antes de empujar un poco más fuerte. Agarramos con más fuerza; tiramos de tu cabello como si nuestro desdén fuera real. Tal vez lo sea. Tal vez con cada movimiento de arriba a abajo de nuestras pollas te vuelvas menos humana y podamos volvernos más viles. Pero ¿no es eso lo que queremos?

Está bien. Fóllate a una de ellos primero. Súbete encima y monta su polla cruda. ¿Te encanta que te estire el coño, sabiendo que tus otros dos agujeros están a punto de llenarse? Cuando tomas una polla en tu boca, espero que todas las nociones de lo que significa ser una "dama" se desvanezcan lentamente. Una buena chica no se dejaría follar por dos hombres al mismo tiempo, y ciertamente no lo disfrutaría.

Cuando me coloco detrás de ti y agarro tus caderas, el sudor cubre tu cuerpo, dándole este brillo. Te hace parecer nuevo, lejos de estar agotada. Escupo en mi mano y froto tu ano. Tocándolo, puedo sentir al otro hombre dentro de ti, bombeando dentro y fuera. Agarrando tu rostro, te hago mirarme mientras entro. Mirarme fijamente a los ojos. Muéstrame que sabes a quién perteneces con esa mirada necesitada, la mirada que dice que lo sientes pero que no cambiarías por nada.

Y ahora tres pollas bombean dentro y fuera de ti con toda la coordinación de una banda de secundaria. Resbalándose de tus agujeros y necesitando ser devueltos, cuerpos alejándose mientras otros empujan, cada uno de nosotros exigiendo tu atención completa cuando no tienes ninguna de sobra.

Rotamos de posición en posición y tu energía se drena lentamente hasta que estás sin aliento y demasiado entumecida para disfrutar u odiar lo que se está haciendo. Voy primero, subiendo encima y deslizándome entre tus piernas. Tus globos oculares se balancean debajo de tus párpados cerrados, pero una leve sonrisa se dibuja en tu rostro. He estado acumulando todo este semen desde que empezamos, y hay muchísimo. Debes sentirlo mientras me corro. Es más de lo que te he dado nunca de una sola vez. Mi cuerpo sabe que estoy compitiendo con otros hombres y no perderé contra ellos.

¿Es por eso que una puta común y corriente me tiene nervioso, apretando los dientes y luchando por ser el que merece la pena? ¿O he estado en negación? Normalmente, sé lo que estás pensando, pero ahora mismo, todo lo que oigo es silencio.

El siguiente tipo toma su turno y te folla el coño lleno de semen. ¿Te gusta cómo se siente, su polla revolviendo la bebida que te he echado? Qué puta eres, que dos hombres se drenan en ti uno tras otro. Pero no es suficiente. Si fuéramos veinte, te los tomarías todos. Seguirías hasta que cada gota se derramara dentro de ti como un balde medio lleno.

Cuando el tercer hombre te folla, todo ese semen se filtra alrededor de su pene y se desliza por tu muslo hasta tu culo. Simplemente quédate ahí como una muñeca sexual. Él no necesita que te muevas. Solo necesita que estés caliente y mojada, y ambos sois esas cosas. Nos aseguramos de eso.

Cuando haya terminado, se irán y tú seguirás aquí. Las sábanas arrugadas a tu alrededor, tu cuerpo lleno y cubierto de nuestros fluidos, todos tus músculos doloridos como si hubieras corrido una maratón: Espero que te sientas realizada aunque la satisfacción sea fugaz. Antes de irnos a la cama, intentarás ponerme duro para que pueda follar tu coño inundado una vez más. Conociéndome, lo haré. Estoy desesperado por que mi semilla gane esta carrera. Pero puede que no. Todavía no estoy seguro de lo que me hará si alguna vez descubro que el bebé que creces en tu útero no es mío. Sospecho que odiaré follarte por el resto de tu vida. Pero ya estaba planeando hacerlo de todas formas.