Para ella, quien sabe!

La conocí hace unos años una aplicación de ligoteo. Hablamos y la verdad que hubo conexión. Nos dimos los teléfonos, pero entonces ya al ponernos cara, ella decidió que yo no era como ella quería que fuera y desapareció sin decir nada. Años después la volví a encontrar en otra red social, esta vez no era de ligoteo pero bueno la verdad que llamo de nuevo la atención pero esta vez me dedique solo a ver desde la distancia, no me apetecía de nuevo un desplante. Había cambiado, era como si fuese el mismo físico, pero en su forma de expresarse algo era nuevo y la verdad que me atraía más aún. Así durante mucho tiempo la seguía y fantaseaba en que pasaría en un encuentro intimo entre los dos, aunque tenia una mezcla entre deseo y el mal sabor de boca. Fue pasando el tiempo y la volví encontrar en una red social, pero esta si era de contactos más explícitos y ahí creí que era la oportunidad que se presentaba de nuevo. Le escribí, varias veces, pero no me respondió, pero esas fotos despertaron el deseo al máximo. Así que me decidí y localice una fiesta en la que iba a estar y allí que me presente. Ella esta radiante, con vestido largo, su sonrisa iluminaba todo a su paso, lo cual me hacía temer un rechazo, pero ya no había marcha atrás. En varias ocasiones cruzamos miradas furtivas, sin ir más allá. De repente, sin saber cómo me giro y me encuentro detrás mío, me mira sonríe, pide disculpas e intenta seguir, pero me interpongo en su camino y le digo, ¿oye al menos un hola qué tal? Ella sonríe y me pregunta nos conocemos, a lo que respondí oaja, pero no. Tras ese momento cada vez que la buscaba ella me estaba observando, notaba como intentaba quizás recordar quien era yo, me dio mío y decidí que aquello era una tontería y me marché de la fiesta. Al llegar al coche, en el aparcamiento, vi una figura que se acercaba, al principio me dio miedo, pero al ver que la silueta se iba definiendo vi que era ella. ¿Se me acerco y me pregunto, te vas? Le responde si, creo que es el momento de irme ya, con una ligera sonrisa. Ella me dijo me llamo María por cierto y se acercó, me dio dos besos, pero de esos que das, pero no te alejas cuando has terminado, y se quedó muy cerca, a lo cual no dude y se los devolví, con un tercero en sus labios, a lo cual, con los ojos muy abiertos, me miro y me dijo, ¿qué haces? Pensé que la había cagado de nuevo, pero sonrió y me dijo, no ha salido solo por uno y de repente me agarro la entrepierna y me dijo, quiero más ¿me lo das? Yo pensé que quizás ella había bebido de más, pero entonces me dijo, no estoy borracha y se lo que hago, y acto seguido, cogió mi mano y la metió bajo su vestido. Poco a poco mientras me miraba, abría la boca dejando salir mucho aire en forma de gemido hasta que llegue a su coño, no llevaba bragas y lo tenía totalmente empapado en ese momento mi polla se lleno de sangre y fuerza y ella lo noto. La libero y empezó a moverla, pero estamos en el aparcamiento le dije, ella me respondió, es aquí y ahora o me voy. Sentí sus pezones duros en mi pecho que además los tenía muy bien bonitos y jugosos, sus grandes dientes mordían mi cuello, y su mano ganaba velocidad en mi polla mientras yo rozaba su coño caliente y chorreante ella se subió más el vestido ya apoyo su pierna en la rueda del otro coche y me dijo, métemela no se como pero ni lo pensé, eran años soñando con ese momento, así que intente meterla poco a poco, pero se hundió sola, entre lo mojada que estaba y ella que me abrazo fuerte cuando sintió mi polla en su coño, le llego hasta fondo de la primera la intentaba sacar pero ella la quería sentir dentro sin más, yo sentía que me iba a correr y me libre de ella, le di la vuelta y se me la volví a meter, pero esta vez el control lo tenía yo y empecé a meterla y sacarla poco a poco, una y otra vez, cuando ya sentí que no podía aguantar más, se lo dije, me voy a correr, ella me dijo córrete donde quieras, no hay problema le dije en tu boca, y ella se giro se agacho ante mí y me dijo, dámela toda, fue mirarla a los ojos y se disparo el torrente de semen que le lleno la cara, ella abría la boca, pero no era suficiente para todo lo que salió en ese momento disparado de mi polla. En ese momento, justo me desperté, todo era un sueño, ella nunca me siguió al coche y nunca más me respondió un mensaje. Quizás al algún día, ocurra y sea mejor aun jejeje