El grandullón y una sorpresa

Ya les hablé de Alberto, un chico cachas que iba a mi gimnasio. En esta ocasión, terminamos con las máquinas, estábamos cansados y sudados, en el vestuario había más gente que en carnavales, entre los de spinning, aerobic, futbito, los que llegaban y los que nos íbamos no cabía un alfiler y la gente estaba molesta. Alberto me dice: coge tus cosas de la taquilla y espérame fuera que nos vamos a duchar más tranquilos. 

Al minuto viene con Jesús uno de los monitores, -nos vamos a su vestuario, dice; vamos al final del pasillo; Jesús, el monitor abre una puerta con llave, entramos los tres y vuelve a cerrar de nuevo con llave, allí había 5 cuartos, entramos en el vestuario masculino, no era muy grande pero sí más desahogado como para 3-4 personas, dejo mi mochila, empiezo a sacar mis cosas y veo que se están dando los dos un morreo, y yo otra vez con la boca abierta, se ríen de mí... Si no puedes vencerlos únete, jejeje. 

Antes de cerrar mi boca, ya estaban desnudos metiéndose mano, me desnudo, me acerco y Jesús me da un morreo agarrándome con sus manos el culo mientras nuestras pollas se rozan, -menudas ganas tenía ya de pillarte cabrón! Que bueno estás, me decía. No era muy alto pero tenía unos músculos bien proporcionados y un culito que... Uf! Comenzamos los tres a meternos mano, pellizcarnos los pezones y chupar nuestras pollas. Alberto alternaba de una polla a otra mientras se pajeaba, después nos alternabamos entre los tres. La polla de Jesús estaba dura con un cabezón precioso, unos huevos suaves como recién afeitados. 

Alberto se tumba en el suelo y nosotros nos sentamos sobre él. Con su lengua estimula la punta de nuestras pollas acercandolas a su boca, prácticamente nos corrimos los dos a la vez mientras toda nuestra leche entraba en su boca. Jesús se dio la vuelta, metió el pollón de Alberto en su boca y se corrió, nunca había visto soltar tanta leche mientras Jesús se la esparcía por su musculado torso. Terminamos de ducharnos y nos fuimos no sin antes darnos un apasionado beso.