Patologías, trastornos y conductas sexuales...

negraflor69 | 15/08/2019 14:03 | 510 veces vista
Hola, abro este hilo par que vayamos recopilando informacion y experiencias (Si las hay y las quieren contar) sobre las mas diversas patologias, trastornos y conductas sexuales, que las han habido y las hay en la larga historia de la humanidad... Y creemos que esto puede suponer un amplio tema de debate-informacion de lo mas variado y curioso para todos.

Por ejemplo, a modo de introduccion, dentro de los trastornos sexuales nos encontramos dos tipos o grupos bien diferenciados:

1- Parafilias: que se caracterizan por una activación sexual ante objetos o situaciones que no forman parte de las pautas habituales de los demás y que puede interferir con la capacidad para una actividad sexual recíproca y afectiva.
2- Disfunciones sexuales: que se caracterizan por inhibiciones del deseo sexual o de los cambios psicofisiológicos que caracterizan al ciclo de la respuesta sexual.

· PARAFILIAS

Esencialmente consisten en que el individuo tiene unas necesidades y fantasías sexuales intensas y recurrentes que generalmente suponen:

1- Objetos no humanos
2- Sufrimiento o humillación propia o del compañero
3- Niños o personas que no consienten
· Hay que tener muy en cuenta que las imágenes o fantasías parafílicas pueden ser estímulo de excitación sexual para una persona sin ello llegar a ser una parafilia. Por ejemplo, la ropa interior femenina suele ser excitante para muchos hombres. Será parafilia sólo cuando el individuo actúe sobre ellas o cuando le afecten en exceso.

Exhibicionismo

La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes de por lo menos seis meses de duración, ligadas a la exposición de los propios genitales a una persona extraña. En ocasiones el individuo se masturba al exponerse o al tener estas fantasías.

Fetichismo

La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes de por lo menos seis meses de duración, que implican el uso de objetos inanimados (fetiches). Ropa interior, zapatos, botas, son fetiches comunes. El individuo se masturba mientras sostiene, acaricia, etc., el fetiche o le pide al compañero que se lo ponga. El objeto ha de ser marcadamente preferido para lograr la excitación sexual. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbada ellas.

Frotteurismo

La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes de por lo menos seis meses de duración, que implican el contacto y el roce con una persona que no consiente. Teniendo presente que lo excitante es el contacto pero no necesariamente la naturaleza coercitiva del acto. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbada ellas.

Pedofilia

La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes de por lo menos seis meses de duración, que implican actividad sexual con niños prepúberes. Los niños suelen ser menores de 12-13 años y el individuo ha de tener por lo menos cinco años más que el niño para que sea considerado el trastorno. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbada ellas.

Masoquismo sexual

La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes de por lo menos seis meses de duración, que implica el acto (real o simulado) de ser humillado, golpeado, atado o cualquier tipo de sufrimiento. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbada ellas.

Sadismo sexual

La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes de por lo menos seis meses de duración, que implican actos (reales, no simulados) en los que el sufrimiento físico o psicológico de la víctima es sexualmente excitante. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbada ellas.

Fetichismo transvestista

La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes de por lo menos seis meses de duración, que implican vestirse con ropas del sexo contrario. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbada ellas. Generalmente guarda una importante colección de ropa para transvestirse cuando está sólo, luego se masturba imaginando que otros hombres se sienten atraídos por él como si fuera una mujer.

Voyeurismo

La sintomatología esencial de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y en fantasías sexuales excitantes de por lo menos seis meses de duración, que implica el hecho de observar ocultamente a otras personas cuando están desnudas o en actividad sexual. La persona ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbada ellas.

DISFUNCIONES SEXUALES

Se consideran disfunciones sexuales a la existencia de inhibición de los deseos sexuales o de los cambios psicofisiológicos que caracterizan al ciclo completo de la respuesta sexual. El ciclo completo de la respuesta sexual se divide en cuatro fases:

1- Deseo: Incluye fantasías y ganas de tener actividad sexual.
2- Excitación: consiste en la sensación subjetiva de placer que va acompañada de cambios fisiológicos. (Erección, lubrificación vaginal, etc.)
3- Orgasmo: Es el punto culminante del placer sexual con la eliminación de la tensión y la concentración rítmica de los músculos del perineo y de los órganos reproductivos pélvicos. En el hombre existe la sensación de inminencia eyaculatoria, seguida de la emisión del semen. En la mujer existen contracciones de la pared del tercio externo de la vagina. En ambos sexos existe a menudo tensiones o contracciones musculares generalizadas.
· Hablamos de disfunciones sexuales cuando una o más de estas fases sufre alteraciones, pudiendo hablar por tanto de:

Trastornos del deseo sexual
Trastornos de la excitación sexual
Trastornos del orgasmo
Trastornos sexuales por dolor

Pero existen muchos mas temas relacionados, ya sean conceptos erróneos considerados por la medicina antigua y aceptados hoy en dia como la homosexualidad, la bisexualidad, y demas tendencias que no quisiera incluirlas aquí, a no ser como anécdotas históricas de la cultura, pues ya de eso se habla extensamente en otros hilos.

NOTA IMPORTANTE: Hay que recordar que la ZOOFILIA y la PEDOFILIA son temas delicados en los que puede puede intervenir la LEY por lo que, siguiendo las normas del foro hay que ser MUY DELICADOS con hacer publicaciones de estos temas, aunque consideramos que se pueden hablar de ellos con un caracter "cientifico" y/o psycológico.
Respuestas (13)
negraflor69 | 15/08/2019 14:05
¿Follas como una loca mientras duermes, te despiertas y no recuerdas nada??

Si mientras duermes te conviertes en un zombi sexual que se masturba o acosa a la persona que tiene al lado sin ser consciente de ello, podrías tener sexsomnia.

a sexsomnia podría ganar el premio al Nombre más Tonto Para una Enfermedad Grave. Este término, acuñado por primera vez en 2003por Colin Shapiro, se refiere de hecho a un conjunto de trastornos del sueño que provocan el mismo síntoma: iniciar inconscientemente una actividad sexual. Quienes sufren de sexsomnia dicen estar dormidos mientras hacen de todo, desde gemir sexualmente o masturbarse a mantener un intercambio sexual completo, pero cuando se despiertan no recuerdan nada de sus escapadas sexuales.

La sexsomnia puede resultar molesta tanto para quien la sufre como para quien quiera que esté durmiendo a su lado. Emily* se sentía tan inquieta por su comportamiento sexual mientras dormía que recurrió a internet en busca de respuestas. Hablamos con gran detalle sobre su problema vía email. "Tiendo a sentirme avergonzada y a veces incluso culpable cuando he tenido un episodio", me dice, "sobre todo porque me preocupa qué habré dicho o hecho". En su vida sexual mientras está despierta, Emily se describe a sí misma como mucho más convencional y mansa que su otro yo sexsomne:

Soy increíblemente agresiva y dominante, digo cosas guarras y tomo el control de todo. Siempre he sido tranquila y algo aburrida en lo que respecta al sexo y siempre me he alejado con timidez de las palabras sucias porque me siento una idiota al hacerlo. Así que oír que soy como una persona totalmente diferente cuando estoy dormida es como un golpe para mi ego, pero al mismo tiempo también un chute.

La sexsomnia es un tipo de parasomnia, como los terrores nocturnos o el sonambulismo, que afecta solo al diez por ciento de la población. Un reciente estudio descubrió que el 4 % de las mujeres que sufren de parasomnia dicen tener comportamientos sexuales durante el sueño. Un estudio llevado a cabo en 2007 desglosó los comportamientos de la sexsomnia por géneros; los investigadores descubrieron que las mujeres que padecían sexsomnia presentan muchas menos probabilidades de iniciar actividades sexuales. Indicaron que "las mujeres casi exclusivamente practicaban la masturbación y las vocalizaciones sexuales, mientras que los hombres comúnmente iniciaban toqueteos sexuales e intercambios completos con las mujeres".

De modo que, ¿por qué iba a ser alguien más agresivo en el sexo mientras está dormido? "Cuando oigo que hago cosas que están completamente fuera de mi zona de confort me pregunto si no será una parte reprimida de mi yo que intenta salir", indica Emily. Otras personas con sexsomnia hablan del mismo comportamiento extrañamente agresivo. "Soy mucho más agresivo [cuando estoy dormido]. Cualquier tipo de preliminar se abrevia, por decirlo finamente", afirma Joseph, que calcula que sufre de un episodio de sexomnia al mes. "[Mis parejas] sin duda se sentían confusas por la repentina intensidad del asunto".

Dormir es mucho más complicado de lo que parece desde fuera. Lo que aparentemente es una desconexión del cerebro es en realidad más como el "modo descanso" de la PlayStation 4 que es tu bella mente. Siguen produciéndose determinadas funciones secundarias: descargas software nuevo, recargas los controladores o, en el caso de quienes padecen sexsomnia, intentas follarte a la Xbox 360 que duerme a tu lado. El sueño se produce en varias etapas que afectan a diferentes partes del cerebro y el cuerpo. Los episodios de sexsomnia se producen en la etapa 3, la de movimiento no rápido de los ojos (NREM). Durante la etapa 3 del sueño, la corteza prefrontal está desconectada. La corteza prefrontal es la encargada de nuestros pensamientos racionales, nuestra toma de decisiones, nuestra moralidad, etc., pero las funciones más básicas como respirar y la respuesta de lucha o huida siguen estando muy activas. Lo más importante para la gente con sexsomnia es que el cuerpo no está paralizado como sucede durante la fase REM. La sexsomnia no es sino una más de las muchas maneras en que responde el cuerpo ante la interrupción de la etapa 3 del sueño. Hablar, caminar y comer en sueños son cosas que suceden cuando alguien es parcialmente despertado durante la etapa 3 del sueño. Sin la corteza prefrontal al timón, el cuerpo se queda a su merced e intenta satisfacer necesidades muy básicas: comer, sentirse a salvo y follar.

No eres tú mismo sin la corteza prefrontal, más bien eres un centro de respuesta andante (o, en este caso, tumbado) para luchar/huir, comer o follar. "Atravesé un período en el que, si me despertaban, inmediatamente sufría un ataque de pánico y tenía que ponerme en pie y empezar a caminar", explica Joseph. Puede que el problema subyacente de Joseph no sea la sexsomnia o los ataques de pánico, sino más bien la apnea del sueño. Emily también sufre problemas del sueño adicionales. Tiene pesadillas extremas y síndrome de piernas inquietas y, si se trata esos problemas, lo más probable es que la sexsomnia desaparezca. Un estudio médico realizado en Stanford trató a 11 personas con sexsomnia. Al tratar el trastorno del sueño subyacente, los médicos fueron capaces de curar a 10 de aquellas 11 personas. En un comunicado de prensa que acompañaba al estudio, el Dr. Christian Guilleminault indicó que "el estado mental dictamina la presentación" del trastorno del sueño, pero el problema principal sigue siendo el sueño en sí.
Entonces, ¿la sexsomnia es resultado de la represión? ¿Quiénes la padecen están encarnando a su yo "auténtico" sin las restricciones que les impone su mente cuando están despiertos? Legalmente, la respuesta es no. Las personas despiertas no están sujetas a sus alter egos durmientes. "La sexsomnia es un trastorno legítimo del sueño que actualmente existe en el derecho legal para ofrecer argumentos en las defensas basadas en automatismos", concluye un estudio médico-legal llevado a cabo en 2015sobre este trastorno. El automatismo es el elegante término legal para "no tener control de las propias acciones". Broadly se puso en contacto con la abogada Bella Bravo, que afirma que el automatismo como defensa legal conlleva dos vertientes. Existen movimientos repetitivos involuntarios (es decir, contracciones o convulsiones) y un estado de semifatiga, lo que ellos denominan una "defensa por apagón". La sexsomnia puede encajar en cualquiera de ambas versiones del automatismo, de modo que puede ser el resultado de convulsiones (opción uno) o un trastorno del sueño similar al sonambulismo (opción dos).

Simplemente porque la sexsomnia esté empezando a ser un trastorno aceptado, eso no significa que los tribunales den carta blanca a las personas que lo utilizan como defensa. "El jurado puede valorar esa prueba, pero también puede decidir que no es suficiente para que las acciones del acusado se consideren como un delito involuntario", afirma Bravo. El Dr. Michel A. Cramer Bornemann, investigador jefe en la Asociación Forense del Sueño, envió un caso de este tipo a Broadly. "Desde los inicios de nuestro grupo, hace más de diez años, un número significativo de solicitudes de investigación por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad y de la comunidad legal tienen que ver con la sexsomnia", explica a Broadly. En el caso que nos hizo llegar, un hombre fue acusado de molestar sexualmente a su hija. Él alegó su sonambulismo como defensa, pero hizo cosas que indicaron a Bornemann que el de aquel hombre no era el caso típico: el hecho de abrir y cerrar la puerta de su hijastra y volver a colocar bien las almohadas indicaban que había funciones cerebrales más elevadas funcionando que las que se hay en un episodio de sexsomnia.
Como hemos visto en los casos de Joseph y Emily, ambos eran más agresivos cuando estaban dormidos, pero ninguno de los dos abandonaba la cama. Si puedes tomar la iniciativa de levantarte y abrir una puerta, no eres un sexsomne. Solo eres un pervertido.
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dara | 15/08/2019 14:45
Jaja..me ha hecho gracia lo de la zombi sexual, me imagino q a muchos hombres no les importara q su pareja padezca esa enfermedad, seguro q es mejor q roncar..jaja,
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turel | 15/08/2019 16:16
Quisiera aclarar que el sadomasoquismo ya no está dentro de enfermedades ni de las parafilias, hace un decada que se eliminó.
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negraflor69 | 15/08/2019 16:46
turel, con el debido respeto, esa es una opinion, bastante personalizada creo yo... Pero segun otras fuentes que datan dentro de la misma decada, sigue siendo una patologia...

La dominación sexual,  también denominada Sadomasoquismo, es una palabra que viene de los términos “sadismo” y “masoquismo”. El Marqués de Sade, escritor y filósofo francés del siglo XVIII, fue el primero que utilizó este concepto en sus obras y el que dio nombre a esta práctica sexual.

Con el tiempo, muchas parejas se han atrevido a combatir la rutina de su vida íntima con nuevas formas de avivar la pasión. Sin embargo, algunos han llegado a extremos como adoptar los roles de amo o sumiso.
Para analizar las conductas BDSM, podriamos hablar con José Bustamante Bellmunt, secretario general de la Asociación Española de Especialistas en Sexología y director del Centro de Psicología, Sexología y Pareja, con sede en Elche y Alicante.El sadomasoquismo se utilizaba para hablar de una patología que tiene que ver con personas que necesitan ejercer la dominación, la violencia o la agresividad para sentir excitación, o bien aquellos que necesitan lo contrario, es decir, sentirse humilladas, en una actitud sumisa o recibir dolor para conseguir placer.

A pesar de ello, hay muchos casos de personas que no llegan a convertirlo en patología como tal, sino que simplemente se aficionan a este tipo de juegos en mayor o menor medida. “Es una distinción muy importante, ya que hay veces que no se trata de un trastorno y es solo una conducta sexual gratificante”, explica el experto.La delgada línea entre trastorno y conducta

¿Dónde está el límite? Está en la necesidad. Hay quienes, para disfrutar del sexo, sienten la necesidad de incluir estos juegos y no se ven capaces de disfrutar de una relación sin practicar la dominación. "Jugar" a forzar no llega a ser sadomasoquismo como tal, sino que es una práctica sexual como otra cualquiera.
“Hay muchos ejemplos de personas que han añadido dentro de sus rituales privados este tipo de prácticas y no supone un problema patológico, sino que las disfrutan. Les sirve para romper la monotonía. Incorporarlo dentro de tu vida sexual no es un problema, siempre y cuando las dos partes estén de acuerdo”, dice José Bustamante.

“Cuando se necesita el sadomasoquismo a toda costa, estaríamos ya hablando de patología” añade el sexólogo en 2014.


Por lo que aun hoy en dia se puede hablar del Sadomasoquismo como una patologia.
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scorpio | 15/08/2019 17:52
Si, he conocido a alguna "zombi sexual" hacerlo con Ella era Como hacerlo con un cadaver!! Ojala esto le sirve a alguien, no digo Nick’s, xa aprender ! 😉
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turel | 15/08/2019 18:32
Depende de las fuentes que leas, en EEUU, se hicieron unos estudios sobre la "cordura" De los practicantes del bdsm y con gente no afin a este movimiento y los resultados obtenidos no dieron que estaban tan equilibrados los unos y los otros. En España, no hay estudios serios sobre el sadismo y el Masoquismo, debes ir a fuentes americanas, donde hay mucha más experiencia
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turel | 15/08/2019 18:40
Si lo dice la OMS creo que algo de razón tengo. Extracto de un artículo y verificado

2018 fue un año histórico para el BDSM, porque el 18 de junio la Organización Mundial de la Salud (OMS), decidió sacar al sadomasoquismo, el bondage, el fetichismo y el travestismo de la lista de enfermedades mentales.

Se trata de un hecho y una fecha históricas porque anula dos siglos de psiquiatría y psicología represivas (patologizadora) de nuestras orientaciones erótico-sexuales
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scorpio | 15/08/2019 19:49
Solo puedo aplaudirte turel!! 👏👏👏
Abre sus mentes y lo q necesiten abrir!!
O solo nos pasa a Los hombres? Dara? 😂😂
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negraflor69 | 15/08/2019 21:41
turel | 15/08/2019 18:32 undefined

Depende de las fuentes que leas, en EEUU, se hicieron unos estudios sobre la "cordura" De los practicantes del bdsm y con gente no afin a este movimiento y los resultados obtenidos no dieron que estaban tan equilibrados los unos y los otros. En España, no hay estudios serios sobre el sadismo y el Masoquismo, debes ir a fuentes americanas, donde hay mucha más experiencia
turel | 15/08/2019 18:40 undefined

Si lo dice la OMS creo que algo de razón tengo. Extracto de un artículo y verificado

2018 fue un año histórico para el BDSM, porque el 18 de junio la Organización Mundial de la Salud (OMS), decidió sacar al sadomasoquismo, el bondage, el fetichismo y el travestismo de la lista de enfermedades mentales.

Se trata de un hecho y una fecha históricas porque anula dos siglos de psiquiatría y psicología represivas (patologizadora) de nuestras orientaciones erótico-sexuales
Yo digo que por que el resto del mundo tiene que afirmar lo que dice EEUU... Por otro lado la OMS no es EEUU, es la Organizacion Mundial de la Salud... Aun asi, tambien veo controversias en estudios americanos que afirman lo mismo que he dicho anteriormente. No solo de EEUU, sino tambien de Inglaterra con un alto indice de activos BDSM, Holanda uno de los paises mas abiertos sxualmente, o Alemania...  

Todos coinciden en que no son un problema mental cuando son obsesivos, como pasa tambien con otras cosas, y que pueden jugar un papel positivo en la relacion de las parejas, como se ha dicho para romper la monotonia o algo mas. Pero tamien se mostraban patrones antisociales y mas agrsivos en las personas mas involucradas en el BDSM, por lo que no deja de ser una patologia...   Y claro, no es lo mismo verlo desde adentro que desde afuera...
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negraflor69 | 15/08/2019 21:42
¿Es BDSM saludable o patológico?
Publicado en 10 de marzo de 2015

La comunidad BDSM (disciplina de esclavitud, sumisión de dominio y sadismo-masoquismo) se ha enfrentado a una gran controversia en el pasado, derivada de representaciones conflictivas en los medios e incluso datos conflictivos presentados por investigadores y psicólogos. La investigación sobre el estilo de vida BDSM es extensa debido a ideas poco claras sobre si las relaciones BDSM son saludables o dañinas y los objetivos de muchas investigaciones para descubrir las verdaderas motivaciones y dinámicas en la comunidad BDSM.Se han realizado investigaciones sobre los posibles efectos negativos de los roles "dominantes" y "sumisos" en la relación BDSM. El Dr. Will Damon, de la Universidad de Illinois, hizo un estudio de las opiniones de los hombres heterosexuales en la comunidad BDSM sobre las mujeres y las posibles actitudes sexistas o misóginas (Damon, 2002). “Los doms (dominantes) masculinos (heterosexuales) se dedican a la dominación y la sumisión, mientras que los subs (sumisos) se dedican a la adoración y la sumisión. Dada la naturaleza de los comportamientos, parece razonable preguntar qué actitudes hacia las mujeres los acompañan ”(Damon, 2002). El estudio incluyó a 342 hombres que informaron que les gustaban las actividades de S&M, y sus niveles de sexismo y autoestima se evaluaron mediante el Inventario de sexismo ambivalente y una encuesta de evaluación de autoestima de 10 puntos (Damon, 2002). El estudio encontró que las parejas sumisas eran más sexistas, tanto benévolas como hostiles, que las dominantes (Damon, 2002). Este estudio negó la idea de que los hombres que actúan como dominantes sobre una mujer en una relación BDSM están tratando de combatir los sentimientos de insuficiencia (Damon, 2002). Que los hombres estén tratando de controlar a las mujeres por falta de control en otra parte de su vida es un error común de las relaciones BDSM.

Otra investigación ha relacionado el BDSM y el sadomasoquismo con la necesidad de ejercer control para superar el abuso y el trauma en el pasado (Connolly, 2006). La asociación con la comunidad BDSM también puede generar problemas legales, según un artículo del Dr. Bruce Gross en Forensic Examiner (Gross, 2006). Los clubes que brindan "servicios dominatrix" pueden ser acusados de prostitución o proxenetismo, e incluso si dos participantes dan su consentimiento, se pueden presentar cargos penales de agresión y agresión (Gross, 2006). Si alguien se involucra en una relación BDSM, eso también se puede mantener en su contra en casos de custodia de menores (Gross, 2006). Todos estos problemas se relacionan con la estigmatización y la incomprensión de la comunidad BDSM en su conjunto.

En el otro lado del debate, el BDSM es visto como una forma saludable de expresión sexual, con la participación de diversas edades, géneros, orientaciones sexuales y grupos étnicos. También hay muchos niveles y formas diferentes en que las personas participan en el estilo de vida BDSM. "El BDSM a menudo se malinterpreta para tener que ver con el dolor, mientras que se trata más de juegos y juegos caracterizados por el poder y la humillación" (Wismeijer y Assen, 2013). El Dr. Andreas Wismeijer y el Dr. Marcel van Assen de la Universidad de Tilburg estudiaron cómo los practicantes de BDSM se comparan con los grupos de control en términos de características psicológicas, específicamente las características de personalidad de los "cinco grandes"; neuroticismo, extraversión, amabilidad, apertura y contención (Wismeijer y Assen, 2013). Descubrieron que los miembros del grupo BDSM obtuvieron puntajes más altos en extraversión, apertura a nuevas experiencias,  contencioso, y menor en neuroticismo que aquellos en el grupo de control, no asociado con la comunidad BDSM (Wismeijer y Assen, 2013). Los participantes que se identificaron como participantes en las actividades de BDSM obtuvieron una puntuación más baja en la aceptación que el grupo de control (Wismeijer y Assen, 2013). En respuesta a las afirmaciones de que el abuso infantil conduce a la participación en BDSM, el estudio encontró que, "si se encontraron diferencias en el apego, el grupo de control tenía los puntajes de apego más bajos, mientras que los doms obtuvieron los puntajes más altos" (Wismeijer y Assen, 2013). Este estudio muestra que muchos rasgos de personalidad negativos que se han asociado con BDSM no solo son poco comunes, sino que son más comunes en los participantes que no son BDSM. Los participantes que se identificaron como participantes en las actividades de BDSM obtuvieron una puntuación más baja en la aceptación que el grupo de control (Wismeijer y Assen, 2013). En respuesta a las afirmaciones de que el abuso infantil conduce a la participación en BDSM, el estudio encontró que, "si se encontraron diferencias en el apego, el grupo de control tenía los puntajes de apego más bajos, mientras que los doms obtuvieron los puntajes más altos" (Wismeijer y Assen, 2013). Este estudio muestra que muchos rasgos de personalidad negativos que se han asociado con BDSM no solo son poco comunes, sino que son más comunes en los participantes que no son BDSM. Los participantes que se identificaron como participantes en las actividades de BDSM obtuvieron una puntuación más baja en la aceptación que el grupo de control (Wismeijer y Assen, 2013). En respuesta a las afirmaciones de que el abuso infantil conduce a la participación en BDSM, el estudio encontró que, "si se encontraron diferencias en el apego, el grupo de control tenía los puntajes de apego más bajos, mientras que los doms obtuvieron los puntajes más altos" (Wismeijer y Assen, 2013). Este estudio muestra que muchos rasgos de personalidad negativos que se han asociado con BDSM no solo son poco comunes, sino que son más comunes en los participantes que no son BDSM. el grupo control tuvo los puntajes de apego más bajos, mientras que los doms obtuvieron los puntajes más altos ”(Wismeijer y Assen, 2013). Este estudio muestra que muchos rasgos de personalidad negativos que se han asociado con BDSM no solo son poco comunes, sino que son más comunes en los participantes que no son BDSM. el grupo control tuvo los puntajes de apego más bajos, mientras que los doms obtuvieron los puntajes más altos ”(Wismeijer y Assen, 2013). Este estudio muestra que muchos rasgos de personalidad negativos que se han asociado con BDSM no solo son poco comunes, sino que son más comunes en los participantes que no son BDSM.

Otro estudio, realizado por la Dra. Danielle Lindemann de la Universidad de Columbia, analizó los "beneficios terapéuticos" proporcionados por los dominantes (específicamente dominatrices femeninos) a sus sumisos (Lindemann, 2011). El investigador entrevistó a 66 mujeres dominatrices profesionales a las que se les paga para "dominar física y verbalmente a los clientes masculinos", que es un grupo de participantes diferente a los estudios previos citados en esta discusión (Lindemann, 2011). Estas mujeres estaban brindando información sobre sus prácticas y puntos de vista sobre su profesión para un artículo separado cuando el investigador encontró a un gran número de mujeres arbitrándose a sí mismas como "terapeutas" y llamando al trabajo que hacen "terapéutico", lo que llevó al investigador a centrarse sobre estas declaraciones e incluir el tema en futuras entrevistas con dominatrices (Lindemann, 2011). Las cuatro formas en que las "sesiones" se describieron como terapéuticas fueron: "alternativas saludables a la represión sexual, como rituales de expiación, como mecanismos para obtener control sobre traumas previos y (en el caso de" sesiones de humillación ") como procesos a través de los cuales los clientes experimentan revitalización psicológica a través de la vergüenza ”(Lindemann, 2011). Otro aspecto interesante de este artículo es que algunas de las mujeres entrevistadas tenían ideas de que sus clientes eran patológicas y sufrían traumas pasados, similar a lo que describieron Connolly (2006) y Gross (2006) (Lindemann 2011). Si bien el BDSM no se considera una forma tradicional de terapia, ni los dominatrices son profesionales médicos autorizados, creo que las ideas expresadas en este artículo atestiguan el hecho de que en una relación sexual donde hay confianza y comunicación,

Es mi opinión que pertenecer a la comunidad BDSM y participar en actos consensuales sado-masoquistas no son decisiones poco saludables. Según los investigadores anteriores, el BDSM está relacionado con el trauma, el abuso, la falta de control o incluso el desarrollo atrofiado, pero desde entonces estas teorías han sido refutadas. Hoy en día hay más investigaciones que muestran una falta de correlación entre los problemas psicológicos y el BDSM en las relaciones saludables y los beneficios reales de estar abierto a explorar diferentes formas de expresión sexual (Wismeijer y Assen, 2013). Las personas en la comunidad BDSM han demostrado tener una mayor autoestima, altos niveles de educación, mayor apertura a las experiencias y muchas otras cualidades valiosas (Damon, 2002, Wismeijer y Assen, 2013).
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mcperkins | 16/08/2019 08:51
Durante mucho tiempo, los psicólogos han considerado el sadomasoquismo un trastorno psicológico. Incluso hoy en día, el sistema diagnóstico internacional CIE-10 lo recoge bajo la categoría de «parafilia». El manual DSM-5 califica al BDSM como una parafilia, pero solo lo considera un trastorno si supone un daño para uno mismo o para los demás.

DSM (Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders) es el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales de la Asociación Americana de Psiquiatría (American Psychiatric Association, APA) y contiene descripciones, síntomas y otros criterios para diagnosticar trastornos mentales.

 Estudios hay muchos y muchas conclusiones... He leido que quienes practicamos el BDSM somos más inteligentes y psicológicamente más estables ... tiene su lógica en parte pero no se hasta punto lo de más inteligentes ... La parte inteligente será por disfrutar plenamente de todo sin reprimirnos y sin tabues... Creo que eso es lo más inteligente ... el poder disfrutar de lo que  guste como te da la gana... Aunque siempre lo he dicho y lo seguiré diciendo ... La mayoría  de la gente habla del BDSM sin saber lo que es y como es ... de oidas. Para los que lo practicamos hace años da rabia escuchar siempre lo mismo ... Se piensan que el BDSM es dolor y dar palizas y azotes... Yo no opino de Física cuántica porque no tengo puta idea... Pues lo mismo deberían de hacer algunos que hablan sin saber... Y no me refiero a este post ..podemos debatir aquí mil cosas sobre el BDSM pero cada uno seguirá teniendo su opinión...
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misteriuswoman | 17/08/2019 08:43
Francamente es difícil armarse una opinión fundamentada del BDSM desde fuera. También es muy difícil contaros todo un mundo en breves líneas, pero quiero decir unas palabras...

En primer lugar, TODO lo que ocurre en el BDSM es Sano, Seguro y Consensuado. Ese es el pilar básico por el que se rige este mundo. Lo que no cumpla esa norma, NO es BDSM. No hay ningún tipo de abuso, todo se habla, todo se pacta.
El Amo/a respeta los límites que pueda tener su Sumisa/o.

Yo me he sentido mucho más segura y protegida en la relación que tengo con mi Amo, que en cualquier otro tipo de relación fuera de este mundo.

Soy inmensamente feliz con mi Amo. No somos seres desdichados, ni sufrimos desordenes mentales jejejej Mas bien es todo lo contrario. Emocionalmente construimos relaciones bastante fuertes, y cuidamos mucho nuestra salud mental.

Ya que tengo la oportunidad, quería hacer una propuesta:

Sumisa busca a chica, preferiblemente joven, para un trío diferente. Si sientes curiosidad por el BDSM, ésta puede ser una buena oportunidad para ti. Hablarías conmigo (la sumisa) primero. Recuerda que todo es pactado, y también lo será contigo.
Tendrías la oportunidad de ver cómo funciona una relación Amo/sumisa, sin participar directamente en este mundo sino quieres. Contigo sólo sería sexo normal :-)

PD: No necesito hablar con dominantes, no me enviéis mensajes. Tengo Amo. El respeto es fundamental. Gracias :-)
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negraflor69 | 24/08/2019 12:02
Los levantadores de pesas olímpicos, los boxeadores profesionales se someten a una rigurosa disciplina que construye y mantiene ese aparato muscular que cada día amenaza con desinflarse con asombrosa facilidad. El músculo necesita ejercitarse cada día para evitar la decadencia.
Pero el poder en toda su plenitud es algo más que simple fuerza muscular. El poder se construye con la fuerza psicológica del dominante y con la supuesta debilidad del dominado. Porque la vocación y el sentido último del poder consiste en liberar su energía sobre algo, la mayoría de las veces sobre alguien.
Podríamos considerar al fisicoculturismo como la abstracción inocente de la primitiva actitud de presumir de la fuerza propia para impresionar la debilidad ajena. En la mayoría de las especies animales, el macho infla alguna parte de su cuerpo, despliega todas sus plumas, organiza una danza ancestral, ruge, grita para impresionar a las hembras y a otros machos. ¿Qué otro sentido tendría ese clásico sinsentido de ir a la guerra con una banda de músicos suicidas al frente? Sólo dominando el ánimo ajeno una fuerza muscular puede ejercer plenamente su poder.
Probablemente estas leyes biológicas y psicológicas se aplican también a escala social e histórica. Cuando el desafío al poder de turno no existe se lo inventa. Porque como el sexo y el erotismo, el poder no puede estar inactivo mucho tiempo. Cuando un imperio o un pequeño dictador ven su poder en cuestión, inventan algún conflicto. Una guerra, un desplazamiento de armas, un desfile descomunal de tanques y soldados que se mueven como máquinas ante las narices de su propio pueblo y ante los ojos del resto del mundo. 
Porque el poder es así de ridículo y así de trágico. 

EL EROTISMO DEL PODER.

En el erotismo clásico, la hembra, como las flores, seduce por su demostración de debilidad. La belleza de la fragilidad femenina es el premio al ejercicio del poder masculino. Probablemente este precepto y percepción de la belleza femenina es un invento masculino del neolítico y un éxito del Renacimiento primero y de Hollywood después.
Lo femenino seduce porque lo masculino conquista hasta que vence el sexo. Es un triunfo puramente simbólico y, por lo tanto, más real que la realidad. En el lenguaje tradicional este juego de poderes se describe con palabras como poseer y ser poseído, en “te haré mía” y “hazme tuya”, en símbolos como la bandera que alguien clava en la cumbre de una montaña, en una tierra conquistada o en la Luna misma.

El erotismo es tensión social que el sexo relaja. Luego llamamos arte a todo lo que contribuye al incremento de esta tensión y pornografía al resto del proceso. Por esta razón, una de las fórmulas eróticas más practicadas y menos reconocida consiste en incrementar deliberadamente esta tensión de opuestos por la distancia que media entre lo femenino y lo masculino, lo rico y lo pobre, la belleza y la fealdad, la fragilidad y el poder. De ahí la obsesión literaria y, sobre todo, la obsesión de la cultura popular y de la cultura del consumo, por lo femenino de las clases altas posando y contrastando en algún peligroso y decadente barrio de paredes despintadas, de las reinas de la música pop norteamericanas grabando sus eróticos videoclips en las favelas de Rio de Janeiro. (Para la cultura del consumo, no hay música sin excitación sexual.)

Así, como en todo carnaval, el mendigo se viste de rey, el pobre vence en el sexo, el poder se trasviste de hembra —el poder es un travesti de corazón—, la clase alta se humilla por un día, and so on.

Este orgasmo, simbólico y real, es la liberación final de la tensión social organizada por el poder. De la misma forma, en culturas más antiguas, faraones, emperadores y reyes debían sufrir y sangrar ante su pueblo una vez al año para legitimar su poder.
El amor se despliega con los mismos actos y gestos, y suele estar entreverado, pero es otra cosa.
Claro, como todo lo humano, el amor nunca se encuentra en estado químicamente puro y casi siempre se encuentra contaminado de odios, celos, envidias y todos los demás tóxicos que derivan del poder dominante.
Porque el poder dominante define las reglas del erotismo pero nada tiene que ver con el amor.

LA CONQUISTA A LA LUNA (Una metáfora en la vida real)
Porque el hombre no pisó la Luna. El hombre se la clavó.

El objetivo real de la millonaria empresa norteamericana, irguiendo el descomunal pene del Saturn V, fue la conquista simbólica, la demostración de poder ante el otro macho vencido, la Unión Soviética.
El primer hombre en la Luna fue Neil (en escocés y en irlandés, “campeón”) Armstrong, que si separamos como “Arm-strong”, en inglés significa “brazo fuerte”. Amstrong no tuvo ninguna misión práctica. El objetivo central fue la derrota del rival mediante la conquista de la Luna —es decir, de la Tierra.

El vencido tuvo que conformarse con ver al Águila, símbolo de la posesión, clavando el mástil de su bandera en el femenino más famoso de la historia, desde los mitos más antiguos hasta los poetas más modernos, la Luna.
Posteriormente surgieron las teorías que negaban semejante hecho, blandiendo medio centenar de excusas fácilmente refutables, lo que también se asemeja a la negación del vencido en la conquista amorosa. El vencido confirma su derrota dedicando sus energías a difamar al vencedor.
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